Sacar música en estos momentos es muy raro
Cuarentena y nuevo disco, esa es su situación actual, con respecto a lo musical por supuesto. Con respecto a su vida personal, se encuentra descubriéndose día a día como papá de Lila, la pequeña hija que junto a la actriz argentina Violeta Urtizberea.
Cuando la carrera artística de Juan Ingaramo empezaba a ponerse mejor, ¡pandemia mundial! Se lo toma con calma, tiene un material discrográfico que se gestó y se está terminando de definir, en distintos puntos del continente.
Les pasó a muchos, artistas o trabajadores comunes con algún proyecto o emprendimiento, la situación sanitaria que se vive a nivel global, obligó al parate. Él particularmente se detuvo en la fase final de grabación de su disco más ambicioso hasta la fecha, que está siendo concebido y ensamblado en diferentes puntos del continente.
El cantante de Córdoba se encuentra bien aunque sin posibilidades de avanzar como quisiera con la música, agradece poder pasar tanto tiempo con la bebé y reconoce que si no fuera por esto, le sería imposible pasar tanto tiempo juntos.
¿La paternidad te da espacio para tocar?
Sí, cuando se duerme o está tranqui, le toco a ella. Hice un par de vivos que disfruté bastante y que se re armaron. Van saliendo algunas canciones, pero nada de oficio. Y mientras tanto estamos terminando el disco que está hecho en un ochenta por ciento.
Ni bien se reactive todo esto tengo que grabar un par de voces, nos tienen que llegar unos arreglos desde Miami, mientras el ingeniero de mezcla lo está mezclando en Colombia... Todo está funcionando, esperando que se normalice la cosa, porque tampoco tengo apuro.
No quiero sacar el disco en una circunstancia rara, es un disco que espero hace mucho, entonces quiero que esté todo tranquilo y normal. Seguramente salga en junio o julio. Creo que sacar música en estos momentos es muy raro.
Puede estar bueno, puede servirle al público y puede servirle al artista para seguir con presencia, pero pensá que J Balvin sacó ese disco (Colores) y no pudo sonar en ningún boliche, en ningún auto, en ninguna previa. No se pusieron de moda las canciones, no pasó nada. Es muy fuerte.
¿Qué podés adelantar del disco?
Hay un par de hits: hay uno que está muy bueno que es sorpresa, pero es ‘crossover’ quizás... También el disco entra en zonas que me resultan nuevas, que también las escucho frescas para el sonido mainstream y me da cagazo, me pone en un riesgo; esa también es una variable que me gusta, que necesito. Es otro sonido. Lo hicimos con Nico Cotton, también (al igual que su álbum anterior, Best Seller, de 2018), pero esta vez en el team global hay mucha más gente involucrada, desde lo compositivo, hasta lo de los arreglos, instrumentos, mezcla, mastering.
Después de los Latin Grammys y todo eso, se me abrió el panorama y la posibilidad de hacer las cosas a ese nivel, pese a la cotización del dólar.
¿Cómo estás viendo la situación de tu gremio, en medio de este panorama tan complicado?
Sí, pienso en los colegas que tuvieron que suspender eventos importantes, shows claves, o lanzamientos que tuvieron que hacer en tiempos de pandemia... Pero bueno, también estamos haciendo música, no es que sacamos a la venta un auto nuevo, así que se da la posibilidad de seguir haciéndola o que la gente la escuche después. Sí la cuestión laboral y económica se complica, pero como se complica la de todo el mundo: la de la empleada de Mc Donalds que le están pagando el 25 por ciento del sueldo hasta la de los empresarios garcas que están perdiendo millones.
¿Qué es lo que más estás extrañando?
Tocar, jugar al fútbol, salir a comer, en ese orden quizás. Es loco porque ya te vas acostumbrando y perdés un poco de... es muy raro. Pero también me llevó a comprobar y a analizar las cosas fundamentales, que no son las materiales. En ese sentido queda en evidencia eso. Y para nosotros, en esta de estar guardados en “plan baby”, es ideal.
fuente: Rolling Stone Revista