La influencia del período en el rendimiento
¿Qué papel juega el ciclo menstrual en el fútbol femenino? La Selección Estadounidense y el Chelsea FC Women fueron dos de los equipos pioneros que decidieron hacer un seguimiento del ciclo menstrual de las jugadoras para ver cómo influía en la coordinación, el rendimiento y la susceptibilidad a sufrir lesiones. ¿Hay momentos más favorables que otros para el desarrollo de la actividad física? ¿Es posible hacer cambios que ayuden a enfrentar mejor la carga de los entrenamientos?
Con el fútbol volviéndose una práctica cada vez más habitual entre las mujeres, en los últimos años empezó a surgir una cuestión que décadas de dificultades para profesionalizar este deporte no habían abordado antes: la influencia del ciclo menstrual en el rendimiento de las jugadoras.
Fue para mitades de la década del 2010 cuando, por primera vez, la mundialmente conocida entrenadora Dawn Scott empezó a notar que las jugadoras del equipo de fútbol estadounidense que ella preparaba, informaban determinados síntomas en momentos similares de su ciclo y pensó que el seguimiento del ciclo menstrual podría servir como herramienta a favor de las deportistas.
A siete meses de comenzar el torneo de la Copa del Mundo de 2019, y tras notar en algunas jugadoras una correlación entre las distintas etapas del ciclo menstrual y las variaciones en la calidad del sueño, los niveles de fatiga e incluso la presencia de dolores musculares y de lesiones, decidió ponerse en contacto con la Dra. Georgie Bruinvels para preguntarle cómo podían adaptarse las jugadoras para estar mejor paradas frente a la carga que el entrenamiento implica.
Georgie Bruinvels es científica deportiva e investigadora en Orreco, compañía que se dedica a dar soluciones para optimizar el rendimiento de los atletas. También lidera la ciencia detrás del Programa de Atletas Femeninas y de la aplicación FitrWoman, que ayuda a realizar un seguimiento del ciclo menstrual y brinda entrenamiento personalizado y sugerencias nutricionales adaptados a los niveles hormonales cambiantes a lo largo del ciclo.
Esta última herramienta, junto a educación a las jugadoras sobre su propia fisiología, el sistema reproductivo femenino, nutrición, los efectos que la menstruacion podría tener en el rendimiento, y algunas cuestiones más; fueron el "arma secreta" de las victorias consecutivas que tuvo el equipo en la Copa del Mundo de Fútbol Femenino en 2015 y 2019.
"Les dijimos a las jugadoras que todo era muy individual y que se trataba más bien de cuáles eran los síntomas, si el sueño se veía alterado y se sabía que estaba ocurriendo antes del inicio de la siguiente menstruación, entonces qué podíamos hacer, cómo podíamos mejorar la higiene del sueño, asegurarnos de que todo era correcto desde el punto de vista nutricional y de que todo lo que se hacía antes de acostarse iba a favorecer un mejor sueño nocturno, y eso era lo mismo para todos los elementos, ya fuera fatiga, dolor de espalda, sensación de inflamación, calambres menstruales, etc. y ese ha sido el proceso a partir de ahí, pero ha sido la parte educativa ante todo. Algunas se mostraban escépticas al respecto, explica Dawn.
"El ciclo menstrual debería ser un área (en la que centrarse) tanto como un calentamiento o una sesión de fuerza. Hay que preguntarse en qué fase estás, qué debes hacer desde el punto de vista estratégico para minimizar el impacto de los síntomas en tu rendimiento o recuperación. No se trata de cambiar tu entrenamiento o no estar disponible para un partido".
"El proceso implica identificar cuáles son los síntomas y cómo podemos reducirlos. No estamos hablando de que esta jugadora no está disponible para el partido porque ha empezado su período, no se trata de eso en absoluto."
Dawn Scott fue entrenadora de alto rendimiento de la Selección Nacional Femenina de EE. UU. hasta 2019, cuando renunció para ocupar un puesto similar en la Asociación de Fútbol de Inglaterra. Chelsea se convierte en el primer club en adaptar el entrenamiento a los ciclos menstruales. El Chelsea FC Women anunció en el 2020 que el equipo estaba utilizando una aplicación especializada —FitrWoman— para adaptar su programa de entrenamiento a los ciclos menstruales de las jugadoras. La que decidió encargarse del asunto fue Emma Hayes, entrenadora del equipo inglés, al diseñar los planes individuales en torno a las fases del ciclo menstrual y, de esta manera, ayudar a controlar las fluctuaciones de peso, que con frecuencia afectan a las atletas durante ciertas fases de sus ciclos, así como también para reducir la susceptibilidad a sufrir lesiones.
"El punto de partida es que somos mujeres y pasamos mensualmente por algo muy diferente a los hombres", sostuvo Hayes. "Tenemos que tener una mejor comprensión de eso porque nuestra educación nos falló en la escuela; no nos enseñaron sobre nuestro sistema reproductivo. Viene de un lugar de querer saber más sobre nosotras mismas y entender cómo podemos mejorar nuestro desempeño".
fuente: FiloNews