Finalmente se resolvió a favor de la artista
En un giro reciente de los acontecimientos, la Policía del estado de Nueva Gales del Sur, Australia, ha confirmado que no se presentarán cargos contra Scott Swift, el padre de la famosa cantante Taylor Swift. Este anuncio surge después de una investigación sobre un incidente en el que se acusó a Scott de golpear a un fotógrafo después de un concierto de su hija en Sydney, a fines de febrero de este año.
El conflicto se originó cuando Taylor Swift, la estrella del pop mundialmente reconocida, estaba en Australia como parte de su gira internacional. Después de uno de sus shows en Sydney, un fotógrafo llamado Ben McDonald alegó haber sido agredido por el padre de Swift. McDonald, de 51 años, informó a las autoridades que fue golpeado cuando intentaba tomar fotografías de Taylor Swift saliendo de una fiesta en un yate en el puerto de Sydney.
La policía llevó a cabo una investigación exhaustiva sobre las acusaciones, incluyendo el testimonio de McDonald, quien detalló el supuesto ataque. Según McDonald, el incidente ocurrió mientras perseguía a Taylor Swift para capturar imágenes de ella saliendo del yate bajo la protección de paraguas y seguridad. Fue en este contexto que afirmó haber recibido un golpe por parte de Scott Swift.
Sin embargo, tras una cuidadosa consideración de los hechos y las pruebas presentadas, la Policía de Nueva Gales del Sur ha decidido no avanzar con acciones legales contra el padre de la cantante. En un comunicado, la autoridad policial indicó que "no habrá más acciones policiales" relacionadas con este caso, poniendo fin a las especulaciones y preocupaciones sobre posibles repercusiones legales para Scott Swift.
Este desenlace cierra un capítulo controvertido en la estancia de Taylor Swift en Australia, permitiendo a la artista y su familia concentrarse de nuevo en su música y su gira. Mientras tanto, el debate sobre la privacidad de las celebridades y los límites de los paparazzis sigue siendo un tema relevante en la industria del entretenimiento.